miércoles, 28 de noviembre de 2007

De ALCALDES y RETRIBUCIONES

El primer pleno de una legislatura municipal es la sesión de investidura de los nuevos alcaldes y alcaldesas, la puesta de largo de la persona que va a dirigir y representar a nuestro pueblo, que va a conducir nuestros designios de forma más cercana. Desde ese día y de durante cuatro años será o al menos debería ser el referente humano de un pueblo. Un puesto que hay que dignificar, como me decía un amigo, en todos los aspectos. Uno de esos aspectos es el económico, importante como el que más y fundamental por cantidad de razones. En la segunda sesión plenaria, se nombran y se anuncian los concejales que tendrán una delegación y cuáles serán esas delegaciones. En ésta, se deciden también los sueldos y retribuciones que cobrará la nueva corporación en toda la legislatura. En Belmez seguimos acomplejados cuando se habla del sueldo de nuestro alcalde o alcaldesa. Ningún alcalde durante la época democrática ha tenido un sueldo aprobado en pleno acorde a su responsabilidad, siempre mucho menor y eso siempre lleva a la eterna sospecha de “ya se lo estará llevando por otro lado”. Hace unos días se celebraba en Belmez ese segundo pleno, el que pasa por ser el más importante de todos, y la alcaldesa proponía un suedo para ella de 600 euros netos al mes; tres concejalas con responsabilidades de gobierno 400, Aurora, Julia y Almudena; mientras que Juan José sólo cobrará por asistencia a plenos y comisiones de gobierno, lo que le proporcionará una cantidad media de unos 300 o 350 euros mensuales. Juan Manuel, el concejal que queda y socio de gobierno, cobrará una cantidad de 1.180 euros netos. No puedo estar de acuerdo. Así lo hicimos saber durante la sesión y así lo escribo ahora. No me gustaron las excusas basadas en los sueldos de la legislatura anterior, (que por cierto los concejales socialistas estuvieron dos años sin cobrar), de la antigua alcaldesa y concejales, y en la situación personal de cada uno. Seguimos acomplejados. Un alcalde debe estar dedicado en cuerpo y alma a su pueblo, las 24 horas del día y no debe tener más responsabilidades y trabajo que ese mientras dure su mandato, y eso debe estar reflejado en su retribución. La administración tiene un agujero legislativo importante en este sentido, esto debería de estar ya regulado según el número de habitantes del pueblo y su presupuesto para evitar tanto los excesos como el que un alcalde no cobre casi nada. Para mi, la justicia o solidaridad de un alcalde para su pueblo no debe ir ni debe venderse en lo que vaya cobrar, debe ir en su forma de trabajar y en su capacidad de trabajo y gestión; y si pasados cuatro años no nos gusta, no se le vota y punto. No me parece bien las excusas esgrimidas para que un concejal cobre el doble que la alcalde basadas en su vida profesional, en su trabajo o trabajos paralelos. Y ¡ojo!, no digo que la cantidad sea justa o no. Primero porque debe estar pensando en el pueblo día y noche, y si su situación personal o laboral no se lo permite debería pensarlo mejor y no presentarse, y si lo hace debe dejarlo todo y dedicarse al Ayuntamiento. Si el ayuntamiento no puede pagarle lo que se merece, o no, o lo que necesita para vivir liberándolo de todo, que no se presente. Regular todo esto es el primer paso para empezar a recuperar la confianza en la clase política.
Publicado en en Semanario "Guadiato Información" el día 28 de julio de 2007

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta Corporación sí que sabe!!!. Despues de varios años, hasta hoy, que he leido este artículo, no he sabido lo que le cuesta un pacto al pueblo de Belmez. Y luego dicen que Belmez es lo primero...

Anónimo dijo...

Como el articulo no está actualizado, tendremos que añadir que una de las concejales de I.U. Independiente, se encuentra dada de alta a jornada completa.Pero eso si, nos dice que ella de política no entiende ni entra en temas de política.
Otro gasto para el ayuntamiento.
Mª ROSA LOPEZ VELARDE