Una nueva temporada futbolística comienza. La ilusión de la pretemporada tras los fichajes y algunos partidos de preparación comienza a transformarse en impaciencia y nervios.
Tres formas muy distintas de ver la gestión deportiva de un club amater, tres políticas distintas que marcan los objetivos que se plantea cada equipo, tres clubes en la comarca, cercanos territorialmente pero muy lejanos en su filosofía.
Peñarroya, de nuevo en Andaluza, repescado a última hora volverá a luchar por la permanencia. Entrenador argentino y fichajes que parecen más de un equipo profesional. Han vuelto a hacer un equipo prácticamente nuevo a base de “billetes”. Una plantilla exótica, atractiva mediaticamente, la fusión futbolística expresada a la enésima potencia, un africano junto a un central de Villaralto, muy pocos jugadores locales, los mismo desde hace ya muchos años y nada de cantera. Les deseo lo mejor pero me huele a que lo van a pasar mal.
Espiel se enfrenta a la temporada que debe ser su explosión deportiva de la última época. Excelente planificación para el primer equipo, un plantilla fuerte, compacta, mezcla de veteranía y juventud y con mucha calidad, el entrenador más joven de la categoría, el que mejor la conoce y probablemente el mejor. Mucho dinero para un año en el que además estrenarán el nuevo estadio. Todo de cara para asaltar el ansiado ascenso a Andaluza. Lo que no sea quedar entre los tres primeros me suena a fracaso. Estarán arriba y creo que marcando el ritmo.
Y Belmez, mi querido Recre. Ya nos han bautizado como el Athletic del Guadiato. Cantera, cantera y cantera. Sólo jugadores locales con retoques muy puntuales en puestos muy concretos. Este año sólo en la portería. La apuesta es clara, basar lo esfuerzos en la cantera para que jamás falten jugadores en el primer equipo. La estrella es la implicación de una plantilla que ha “mamado” el escudo; algo que no se puede enseñar ni explicar. El lema “balón al suelo y los cojones pegaos al culo como un león”. El objetivo, seguir creando afición, crecer poco a poco y llevar el nombre de Belmez por esos campos de Dios. El entrenador ya conoce el club y la plantilla, si nos autoimponemos una presión adicional estaremos arriba porque la plantilla es joven pero experta; con algunos jugadores que pasan por estar entre los mejores de la categoría.
La estabilidad en clubes de este corte es fundamental porque proporciona tranquilidad al cuerpo técnico y a los jugadores. Pero claro está, si inviertes unos “eurillos” en crear un plantilla cara, quieres resultados y de forma inmediata.
Reflexionen ustedes y piensen si merece la más la pena en invertir esfuerzos para traer un jugador de fuera o en formar a un chaval del pueblo. Y piensen más: ¿de dónde son normalmente los mejores jugadores de un equipo? ¿Quienes son los que marcan épocas en un club y permanecen en el recuerdo? En fin, esto empieza de nuevo; ¡a jugar! . Yo no me lo pierdo... y ya van 16 años con las botas puestas.
Tres formas muy distintas de ver la gestión deportiva de un club amater, tres políticas distintas que marcan los objetivos que se plantea cada equipo, tres clubes en la comarca, cercanos territorialmente pero muy lejanos en su filosofía.
Peñarroya, de nuevo en Andaluza, repescado a última hora volverá a luchar por la permanencia. Entrenador argentino y fichajes que parecen más de un equipo profesional. Han vuelto a hacer un equipo prácticamente nuevo a base de “billetes”. Una plantilla exótica, atractiva mediaticamente, la fusión futbolística expresada a la enésima potencia, un africano junto a un central de Villaralto, muy pocos jugadores locales, los mismo desde hace ya muchos años y nada de cantera. Les deseo lo mejor pero me huele a que lo van a pasar mal.
Espiel se enfrenta a la temporada que debe ser su explosión deportiva de la última época. Excelente planificación para el primer equipo, un plantilla fuerte, compacta, mezcla de veteranía y juventud y con mucha calidad, el entrenador más joven de la categoría, el que mejor la conoce y probablemente el mejor. Mucho dinero para un año en el que además estrenarán el nuevo estadio. Todo de cara para asaltar el ansiado ascenso a Andaluza. Lo que no sea quedar entre los tres primeros me suena a fracaso. Estarán arriba y creo que marcando el ritmo.
Y Belmez, mi querido Recre. Ya nos han bautizado como el Athletic del Guadiato. Cantera, cantera y cantera. Sólo jugadores locales con retoques muy puntuales en puestos muy concretos. Este año sólo en la portería. La apuesta es clara, basar lo esfuerzos en la cantera para que jamás falten jugadores en el primer equipo. La estrella es la implicación de una plantilla que ha “mamado” el escudo; algo que no se puede enseñar ni explicar. El lema “balón al suelo y los cojones pegaos al culo como un león”. El objetivo, seguir creando afición, crecer poco a poco y llevar el nombre de Belmez por esos campos de Dios. El entrenador ya conoce el club y la plantilla, si nos autoimponemos una presión adicional estaremos arriba porque la plantilla es joven pero experta; con algunos jugadores que pasan por estar entre los mejores de la categoría.
La estabilidad en clubes de este corte es fundamental porque proporciona tranquilidad al cuerpo técnico y a los jugadores. Pero claro está, si inviertes unos “eurillos” en crear un plantilla cara, quieres resultados y de forma inmediata.
Reflexionen ustedes y piensen si merece la más la pena en invertir esfuerzos para traer un jugador de fuera o en formar a un chaval del pueblo. Y piensen más: ¿de dónde son normalmente los mejores jugadores de un equipo? ¿Quienes son los que marcan épocas en un club y permanecen en el recuerdo? En fin, esto empieza de nuevo; ¡a jugar! . Yo no me lo pierdo... y ya van 16 años con las botas puestas.
Publicado en el semanario "Guadiato Información" el día 25 de agosto de 2007
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